Sencillos y económicos.

Ciertamente se trata de una afición que requiere dedicación y dinero. Muchos de nosotros realizamos fuertes desembolsos para acceder al mejor skimmer o pantalla de iluminación pensando que con eso conseguiremos un precioso acuario de arrecife, pero a veces pasamos por alto ciertas prácticas y rutinas de mantenimiento que si las aplicamos correctamente producirán enormes beneficios a nuestro sistema marino. Si quieres tener un acuario marino envidiable, estos consejos te interesan.

Esta afición requiere de sentido común y equilibrio. De nada sirve adquirir los mejores equipos si luego no introducimos especies compatibles o descuidamos el mantenimiento (o nos excedemos en ello, lo cual también puede ser negativo).

A continuación os voy a dar algunos consejos que creo pueden ser de utilidad para la mayoría de los acuarios marinos. Puede que alguno de ellos os resulte extraño y vaya en dirección opuesta a lo que otros autores aconsejan.

Planifica las rutinas de mantenimiento

Algo que muchas veces se queda en una declaración de buenas intenciones. Para tener un acuario marino envidiable es fundamental seguir ciertas pautas de mantenimiento que nosotros mismos estableceremos. Cambios de agua, limpieza de los cristales, limpieza del skimmer y otros reactores, limpieza de las bombas, tests de agua… de nada nos sirve hacer algunas y olvidar otras. El acuario es un sistema que requiere equilibrio en todos sus aspectos.

Lo entenderemos mejor con un ejemplo:

Con el tiempo esto conducirá a un deterioro del acuario.

La estabilidad es clave

Los habitantes del acuario marino y en especial los corales son animales con cierta dificultad para adaptarse a cambios rápidos en alguno de sus parámetros. Desde hace millones de años viven en un medio muy estable y por lo tanto no han desarrollado mecanismos para adaptarse a ciertos cambios; no pueden regular su temperatura, no se pueden desplazar para mantener la energía procedente del sol y tampoco pueden soportar variaciones bruscas de pH o alcalinidad por poner algún ejemplo.

He visto como muchos aficionados se esfuerzan en mantener el nivel de nitratos y fosfatos muy bajo, pero luego no se preocupan cuando suben repentinamente porque introducen varios peces de golpe o hacen un cambio importante en la dieta de los mismos. Igualmente he visto como algunas personas dejan la alcalinidad dentro del rango óptimo pero cada vez que hacen un cambio de agua no lo revisan y producen un cambio brusco en el sistema de un par de grados. Cada vez que sucede este tipo de cosas, los corales se resienten y suelen responder frenando su crecimiento o acumulando zooxanthelas que enmascaran sus bonitos colores.

Por lo tanto, si quieres tener un acuario marino envidiable, no te preocupes tanto por los valores absolutos de los parámetros, es suficiente con que estén dentro de un rango (normalmente bastante amplio) y esfuérzate en que varíen lo menos posible.

Elige y planifica la introducción de animales

Importantísimo, en especial en los primeros meses de vida de un acuario cuando todavía no ha alcanzado un elevado grado de madurez y estabilidad.

Parece de sentido común pero pocas veces respetamos este consejo, y es que los aficionados somos a veces demasiado impulsivos: nos sentimos cautivados por un pez o coral al verlo en una tienda y muchas veces no podemos evitar comprarlo.

Es conveniente decidir que tipo de acuario queremos y hacer una lista de animales compatibles antes de lanzarse a comprar ninguno.

No tengas prisa y disfruta de cada animal que compres, así permitirás que se adapte a su nuevo hogar sin sobresaltos y dejarás que el sistema se mantenga estable amortiguando el incremento de nutrientes.

Si no lo planificamos con cuidado, nuestro acuario puede ser un campo de batalla en el que los peces no paren de pelearse por el territorio, o molesten a los corales y otros invertebrados.

No dejes que se acumulen los sedimentos y detritos

De cada diez acuarios que veo, con suerte uno de ellos tiene el sump limpio de sedimentos. Estas acumulaciones de materia, en su mayor parte heces de los peces, suelen producir problemas a largo plazo y frecuentemente la causa de elevados valores de nitratos y fosfatos.

Mantener el sump limpio es tan sencillo como colocar una o varias pequeñas bombas de movimiento (las hay muy baratas, pero conviene que se puedan sujetar mediante un imán) o sifonar la materia acumulada cada vez que hagamos un cambio de agua.

Usa un skimmer apropiado

Eso de instalar el skimmer más potente que puedas es un mal consejo que hace tiempo hemos superado. Los skimmers sobredimensionados son un gran error, no se puede decir más claro:

• Suponen un enorme desembolso económico, difícilmente justificable.
• Son equipos voluminosos, cuesta ubicarlos en el sump y extraerlos para mantenerlos limpios.
• Retiran demasiadas sustancias del agua, tanto buenas como malas, y lo que es peor, demasiado rápido. Pueden convertir el acuario en un sistema casi estéril.

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No debemos basar la filtración en el skimmer, el cual sólo retirará las sustancias polares, es decir entre un 40 y un 50% de los contaminantes que pueden acumularse en un acuario. Por otro lado, un skimmer excesivamente potente puede ser la causa de que muchos corales cierren sus pólipos, especialmente si hablamos de corales blandos. También retirará elementos traza fundamentales como el potasio (especialmente los de rotor de agujas) lo que inevitablemente repercute en la salud de muchos invertebrados.

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Esto es más que una plausible explicación para los brotes de dinoflagelados y otras plagas que suelen ser habituales en estos casos en los que se produce un desequilibrio y alguno de los nutrientes se convierte en limitante.

Utiliza carbón activo

Y que sea de buena calidad. Un buen carbón activo es mucho más eficiente que un skimmer y adsorberá algunas sustancias que éste no puede retirar como productos químicos desprendidos por aerosoles, sustancias del humo del tabaco y muchas otras que se generan como resultado del metabolismo de los animales del acuario.

El carbón activo también se muestra muy eficaz retirando las sustancias liberadas por algunos corales para inhibir el crecimiento de los demás, lo que se conoce como “guerra química”. Por ello es especialmente útil en acuarios con zooanthus, palithoas, discosomas, etc.

Algo tan barato, tan fácil de usar y tan ignorado. He visto mejorar acuarios de forma espectacular con solo añadir una bolsa de carbón activo. A las pocas horas de introducir carbón activo en el acuario podemos observar una mayor transparencia del agua, cuidado con esto pues podríamos quemar los tejidos de algún coral al mejorar el índice de penetración de la luz en el agua.

Existen muchos tipos de carbón activo: bituminosos, antracitas, vegetales…y dos maneras de activarlos: térmica y química (algunas empresas usan ambas). Como norma general es preferible un carbón activado térmicamente ya que los activados químicamente suelen ser lavados con ácido fosfórico y podrían liberar algún tipo de fosfato al introducirlos en el acuario. En cualquier caso, es fundamental enjuagar profusamente el carbón que decidamos usar ya que el polvo suele irritar a los corales.

Limpia el difusor de la pantalla

Muchas veces no nos damos cuenta, pero el polvo y las salpicaduras de agua pueden reducir la eficiencia de la pantalla en casi un 30%. Es muy importante limpiarla de forma periódica, para ello usar un paño húmedo y tener cuidado especial si es de metacrilato pues los depósitos de sal lo pueden llegar a arañar.

No conviertas tu acuario en un desierto

Independientemente del tipo de peces e invertebrados que mantengas, si quieres tener un acuario marino envidiable no lleves la carga orgánica a un extremo.

Hay que diferenciar entre nutrientes y flujo de nutrientes, dos conceptos similares pero distintos:

• Nutrientes. Son la acumulación de sustancias derivadas del metabolismo de los animales, como los nitratos y fosfatos.
• Flujo de nutrientes. Es el balance entre los nutrientes entrantes y salientes.

En un arrecife natural, el nivel de nutrientes suele ser muy bajo y el flujo de nutrientes moderado y constante. Las corrientes marinas llevan fitoplancton y zooplancton desde las zonas frías hasta las cálidas, es una escasa pero constante aportación que no se puede reproducir en el acuario sin comprometer los niveles de nutrientes.

Hace unos años eran muy populares los sistemas con nutrientes ultra bajos (ULNS), con corales muy pálidos y tonos pastel. Estos corales son muy delicados, sufren frecuentes necrosis (STN) y además presentan un escaso crecimiento.

La tendencia es aumentar la alimentación en cantidad y variedad (y con ello el flujo de nutrientes) y permitir una leve acumulación de nitratos, normalmente por debajo de 0,5 ppm (apenas detectable con un test de NO3). Para ello nada mejor que la observación de los corales más delicados; veremos como los tonos pastel se van convirtiendo en colores fuertes y vibrantes, con profundidad y sin renunciar a los matices. El crecimiento se dispara, lo cual se puede constatar realizando tests de alcalinidad para ajustar el aporte de calcio y carbonatos a la nueva situación. Los peces y corales están más sanos y felices, las bajas disminuyen considerablemente.

Hoy en día podemos ver acuarios marinos envidiables con un bajo pero detectable nivel de nitratos.

Espero que estos sencillos consejos te ayuden a enfocar el mantenimiento de tu acuario marino desde una perspectiva más simple y económica.